El Vía Crucis - Parte 2
6º Estación: La Verónica enjuga el rostro de Jesús
Is 50, 6-7
Ofrecí mi espalda para que me azotaran y dejé que me arrancaran la barba. No retiré la cara de los que me insultaban y escupían. El Señor es quien me ayuda: por eso no me hieren los insultos; por eso me entrego firme como una roca, pues sé que no quedaré en ridículo.
Is 50, 6-7
Ofrecí mi espalda para que me azotaran y dejé que me arrancaran la barba. No retiré la cara de los que me insultaban y escupían. El Señor es quien me ayuda: por eso no me hieren los insultos; por eso me entrego firme como una roca, pues sé que no quedaré en ridículo.
7º Estación: Jesús cae por segunda vez
1 Pe 2, 23-24
Cristo mismo llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre la cruz, para que nosotros muramos al pecado y vivamos una vida de rectitud. Cristo fue herido para que ustedes fueran sanados. Pues ustedes andaban antes como ovejas extraviadas, pero ahora han vuelto a Cristo, que los cuida como un pastor y vela por ustedes.
1 Pe 2, 23-24
Cristo mismo llevó nuestros pecados en su cuerpo sobre la cruz, para que nosotros muramos al pecado y vivamos una vida de rectitud. Cristo fue herido para que ustedes fueran sanados. Pues ustedes andaban antes como ovejas extraviadas, pero ahora han vuelto a Cristo, que los cuida como un pastor y vela por ustedes.
Lc 23, 27-28.31
Lo seguían muchos del pueblo y un buen número de mujeres, que se golpeaban el pecho y se lamentaban por él.
Pero Jesús, volviéndose hacia ellas, les dijo: "¡Hijas de Jerusalén!, no lloren por mí; lloren más bien por ustedes y por sus hijos. Porque si así tratan a la leña verde, ¿qué será de la leña seca?
oli
ResponderEliminar