Gemma Galgani nació el 12 de marzo de 1878 en Camigliano,
Italia. En su niñez quedó huérfana de madre y padre, así que luego de morir su
padre vivió con su tía. Desde pequeña siempre fue una niña muy buena y muy
piadosa.
A los 20 años sufrió una terrible enfermedad que la dejó en
cama por mucho tiempo sin poder caminar. Gemma le pidió con mucha fe a Jesús
que la sanara, y allí fue que comenzaron sus visiones. Se le aparecía su ángel
de la guarda para conosolarla, la Virgen María, y algunos santos, como el joven
santo pasionista san Gabriel de la Dolorosa.
Un día, al terminar de rezar una novena al Sagrado Corazón y
al comulgar, el mismo Jesús le preguntó si quería sanarse, ella respondió que
sí, e inmediatamente quedó curada de su enfermedad.
Por su gran devoción a san Gabriel de la Dolorosa, el gran
deseo de su corazón era ser pasionista. Quiso ser religiosa, pero fue rechazada
en todas las congregaciones por su débil salud.
El 8 de junio 1899, vísperas de la fiesta del Sagrado
Corazón, recibió en una visión las estigmas de la Pasión de Cristo.
En ese tiempo los pasionistas realizaban una misión en la
ciudad de Lucca, donde Gemma estaba viviendo, allí los conoció al fin, y
comenzó con ellos una gran relación de amistad.
Muchos fenómenos relacionados con la Pasión se dieron en la
vida de santa Gemma, y en varias oportunidades tuvo que luchar fuertemente
contra el demonio que la tentaba y confundía constantemente.
El 11 de abril de 1903, a los 25 años, falleció
enferma la casa de la familia Giannini, una familia que la había adoptado en la
ciudad de Lucca.